El gazpacho junto con la paella son quizás fuera de nuestro país lo más emblemático de nuestra gastronomía.
Tiene un origen campesino, ya que estos solían beberlo tras exhaustas jornadas de trabajo en los achicharrantes veranos andaluces, el gazpacho les servia para refrescarse y como alimento.
Es precisamente por este origen popular que las recetas son tan variadas, como se suele decir “cada maestrillo tiene su librillo”. Pero aunque tenga un carácter humilde, en la actualidad ha conquistado las cartas de muchos restaurantes de postín.
INGREDIENTES
• 2 tomates grandes o 3 medianos
• ½ cebolla mediana
• un trocito de pimiento verde
• ¼ de pimiento rojo (pequeño)
• 1l de agua fría
• 15 ml de vinagre de vino tinto
• 45 ml de aceite de oliva
• Sal
• 2 rebanaditas de pan
• 2 dientes de ajo
ELABORACIÓN
En primer lugar, limpiaremos bien todas las verduras, después pelaremos los tomates y los dientes de ajo.
Seguidamente trocearemos las verduras y las colocaremos en el vaso de la batidora junto con el pan.
Luego añadiremos el aceite, el vinagre, la sal (va un poco a gustos) y la mitad del agua. Trituraremos hasta que quede muy fino.
Finalmente verteremos el resto del agua y volveremos a triturar.
Cuando vayamos a servirlo le añadimos unos cubitos de hielo.
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